¡Buenas! Hoy os enseño unos collares que creé hace un tiempo. Es una pena, pero no tengo fotos de cómo los hice. Os lo explico y veréis que no es nada complicado: utilicé una cuerda gruesa como base y la uní por los laterales. Con paciencia, sólo tuve que ir enrollando esta cuerda gruesa con hilos de costura de distintos colores. El resultado me gustó tanto que me animé a hacer un segundo modelo con lanas de colores rojo, amarillo, naranja y azul.
Estos collares me recuerdan a los que llevan las tribus masai. Me sorprende el gusto con el que combinan telas para su vestimenta y la habilidad con las que hacen sus particulares adornos para el rostro, las muñecas y el cuello. Un ejemplo de cómo con pocos recursos se pueden hacer cosas maravillosas.
Para enseñaros ambos modelos he contado con la ayuda de mi hermana ;) Ahí van las fotos:
¡Hasta pronto!Adriana.